Probamos Fujifilm X-E5 - así es fotografiar con la cámara

La nueva Fujifilm X-E5 continúa con la serie X-E de Fujifilm con simplicidad y alegría de fotografiar en mente. En términos técnicos, está bien posicionada, y en términos de diseño se asemeja a la cámara compacta más avanzada de Fujifilm, la X100 V/VI, pero sin algunas de las funciones avanzadas como la posibilidad de cambiar entre visor óptico y digital; la X-E5 solo tiene uno digital.

A pesar de que el diseño tiene muchas similitudes directas, la X-E5 se diferencia en algunos aspectos. El tamaño es aproximadamente el mismo, al igual que la disposición de los controles, pero con un chasis que es más angular que, por ejemplo, la X100 VI, que tiene líneas y bordes mucho más suaves. 

Pero una gran diferencia que quizás sea fácil pasar por alto cuando se ve la X-E5 con el nuevo objetivo Fujinon 23mm F2.8R WR, es que se puede cambiar el objetivo en la cámara, ya que es una cámara de sistema, a diferencia de la X100 VI, que es una cámara compacta con el objetivo similar pero fijo Fujinon 23mm F2 II.

Incluso los controles se sienten, en comparación con la X100 VI, algo más simples y además más pequeños, pero una rápida mirada a su predecesora directa, Fujifilm X-E4, muestra que el lenguaje de diseño es una evolución de esta, inclinándose hacia el de la serie X100.

Usar la cámara es realmente agradable. A mí personalmente me gustan las cámaras X100 y usar la X-E5 ofrece una sensación similar si dejamos de lado las funciones más técnicas que Fujifilm X100 VI tiene, pero al mismo tiempo añade una nueva perspectiva con las funciones que son especiales para la X-E5, sobre las cuales escribimos más en nuestro artículo de noticias.

Girar el dial adicional para cambiar entre diferentes simulaciones de película es una novedad, y ofrece la posibilidad de cambiar rápidamente el estilo de las fotos que se toman, por ejemplo, de una simulación de película en blanco y negro a una receta guardada donde he ajustado las luces altas, el contraste y los colores para obtener mi propio estilo en las fotos.

Lo primero que me molesta es el sensor ocular que apaga la pantalla constantemente cuando cambio con el pulgar (derecho o izquierdo, ambos se pueden usar sin problema). La razón es que quiero obtener retroalimentación directa sobre cómo será la foto que planeo tomar en la simulación de película recién seleccionada, algo que no es posible cuando la pantalla está apagada. 

Sin embargo, si miro en el visor digital, se muestra una rueda gráfica sobre el control en el lado izquierdo, con un carrete de película con el nombre de la simulación seleccionada, es decir, la "película" elegida. Entonces, por supuesto, también se ve el resultado de cómo la simulación seleccionada afecta la imagen.

Pero después de un tiempo, las simulaciones se asientan, y la pantalla en la parte superior hace su trabajo. Es precisamente esta pequeña ventana para la simulación seleccionada la que gira en la imagen y muestra lo que se ha elegido, y entonces sigue siendo más importante obtener retroalimentación visual para el resultado de la imagen; más bien sé que una cierta simulación de película es lo que quiero.

Aquí Fujifilm podría desarrollar aún más el concepto. Lo que veo es que el asunto con la "ventana" es precisamente obtener control sobre la película seleccionada, pero no está del todo claro. Las letras son en lo que uno debe confiar, pero pienso que si de todos modos hay una vista hacia arriba para esta retroalimentación visual, sería bueno que fuera clara: codificar con colores las descripciones para encontrar más rápidamente la correcta, o ¿por qué no tener una pantalla digital como la de Fujifilm X half (X-HF1) donde realmente se siente la película seleccionada?

Vale, quizás soy un poco quisquilloso, y quizás es porque me gusta precisamente la función de elección de simulación, y quiero más de ella. Quizás también contribuiría más a la sensación analógica, o una especie de efecto placebo de nostalgia. Me gusta el concepto.

Lo que sin embargo llena aún más esta sensación es la posibilidad de hacer un viaje retro a los primeros sistemas de información digital que había en el visor de las cámaras analógicas de los años 80. Fujifilm ha decidido que podemos elegir ver toda la información en el visor como Fujifilm suele mostrarla, con iconos gráficos y números. 

Pero para aquellos que quieren más retro, se puede cambiar a una especie de modo "retrostyle" donde obtenemos los números segmentados de color naranja chillón (es decir, los clásicos siete segmentos digitales con los que se puede construir el número 8), junto con un fotómetro en el lado derecho. Afortunadamente, el retraso cuando los números cambian al modificar algo (como la apertura, por ejemplo) está excluido, y de hecho se siente bastante claro cuando se ven los valores presentados de esta manera, aunque llama un poco la atención.

El fotómetro con la pequeña aguja giratoria es en modo automático más un indicador de dónde te encuentras en la rueda de compensación de exposición, es decir, si sobreexpones o subexpones la imagen con tus configuraciones actuales. Si configuras la cámara manualmente para que subexponga, apuntará hacia abajo, por lo que en la práctica se puede seguir para lograr una exposición correcta. Es un poco divertido.

Fujifilm X-E5 también ha recibido el control deslizante de dedo índice que de otro modo encontramos en las cámaras X100, y que no estaba presente en el predecesor X-E4. Ahora el control deslizante ha heredado algunas ideas de la cámara de formato medio Fujifilm GFX 100RF, donde un control deslizante adicional maneja el recorte, lo que permite que quien fotografía con la X-E5 pueda recortar rápidamente las imágenes (dando la apariencia de un tipo de zoom) al empujarlo hacia un lado, o cambiar la relación de aspecto como 1:1, 16:9 y así sucesivamente, si se empuja hacia el otro lado. 

El control deslizante también se puede mantener presionado hacia algún lado, y esa función se puede programar para que lo que haga se adapte a tu fotografía: cambiar alguna configuración, activar algo o hacer alguna elección.

Kamera & Bild prueba la cámara junto con el nuevo objetivo Fujinon 23mm F2.8R WR que puedes leer más sobre aquí. Ese objetivo pancake tiene alrededor de 2,3 centímetros, lo que hace que se adapte bien a una cámara como esta. El manejo es sencillo y ágil, pero el tamaño y el peso son lo que hace toda la diferencia.

La cámara, por lo demás, es bastante rápida y sencilla de manejar, y vamos a echar un vistazo más de cerca a las partes que se encuentran dentro de la carcasa. Si quieres saber más ya puedes leer más en nuestro artículo de noticias sobre la cámara aquí.

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